La neuropsicología infantil es una disciplina científica que estudia la relación entre el sistema nervioso y las funciones cognitivas, los procesos emocionales y de la conducta durante el desarrollo evolutivo, hasta los 18 años.
La neuropsicología infantil, por tanto, se centra en tratar los efectos producidos por lesiones en las estructuras del sistema nervioso central, que como consecuencia afectan a nivel psicológico, emocional y conductual de los menores.
OBJETIVO DE LA NEUROPSICOLOGÍA INFANTIL
Uno de los principales objetivos de la neuropsicología infantil es evaluar y tratar los trastornos del neurodesarrollo que presentan algunos niños. Los trastornos del neurodesarrollo tienen una base neurobiológica y pueden afectar a la adecuada adquisición y/o desarrollo de diferentes capacidades como, la atención, el lenguaje, la percepción, la memoria, la interacción social, etc.
El Manual diagnóstico y estadístico de los trastornos mentales en su quinta edición (DSM-5) incluye dentro los trastornos del neurodesarrollo los siguientes:
Trastorno del espectro del autismo (TEA)
Trastorno por déficit de atención/hiperactividad (TDAH)
Discapacidad Intelectual
Trastornos de la comunicación
Trastornos específicos del aprendizaje
Trastornos motores
Trastornos del neurodesarrollo no especificados
TRATAMIENTOS DE LOS TRASTORNOS DEL NEURODESARROLLO
Tras una adecuada evaluación que ayudará a determinar los déficits que presenta el menor, se debe realizar un plan de tratamiento individualizado que permita conseguir los objetivos establecidos.
En ocasiones, se complementan las terapias farmacológicas y no farmacológicas, como, la rehabilitación cognitiva, que se encarga de estimular las capacidades que no se han desarrollado adecuadamente.
Las técnicas de rehabilitación cognitiva se basan en la consecución de ejercicios y tareas de manera repetitiva que facilitan la activación de los circuitos cerebrales correspondientes a determinadas funciones para mejorar su funcionamiento. También es importante, incluir estrategias compensatorias que sirvan para compensar los déficits, para ello es necesario entrenar al menor en implementar ciertas herramientas, estas pueden ser, una agenda, un calendario, hacer uso de alarmas.
Uno de los fines de la rehabilitación neuropsicológica es generalizar el aprendizaje al contexto natural del paciente, este es uno de los mayores retos a los que nos enfrentamos los profesionales, por esta razón, es primordial la implicación de la familia en el tratamiento.
VENTAJAS DE LA NEUROPSICOLOGÍA INFANTIL
Esta disciplina proporciona numerosos beneficios en los menores, entre ellos:
Mejora del rendimiento escolar. Los niños consiguen integrarse mejor al contexto escolar, la terapia neuropsicológica y las adaptaciones correspondientes a nivel académico hacen que el niño pueda avanzar y mejorar.
Reducción de la ansiedad y depresión. Los menores con dificultades suelen experimentar consecuencias emocionales negativas, tales como la ansiedad, trabajar los déficits aumenta su capacidad de autosuficiencia.
Mayor calidad de vida del menor y de la familia. La mejora se generaliza a otros contextos, facilitando la vida familiar y también social del menor.
En definitiva, la neuropsicología infantil pretende mejorar la calidad de vida de los menores, una pronta intervención puede ser clave para su avance en el desarrollo.
(Beatriz Silva García)